domingo, 22 de enero de 2017

Caminando hacia el próximo 30 de enero, Día de la Paz y la No Violencia.

54 años después de "un sueño",
 tenemos que seguir tejiendo hilo a hilo desde todos puntos del planeta,
un entramado de paz universal.
                El 15 de enero es un día festivo y muy especial en EEUU porque recuerda el nacimiento en Atlanta de Martin Luther King (1929) que lideró el movimiento por los derechos civiles de los afroamericanos, se manifestó públicamente contra la guerra de Vietnam y contra la pobreza de la población en general  siempre empleando medios no violentos. Premiado con el Nobel de la Paz en 1964, fue asesinado en Menphis el 4 de abril de 1964 antes de  emitir un discurso, aunque ya antes, el 8 de agosto había pronunciado   otro, uno de los más famosos del siglo XX en el que declaró a su comienzo la célebre frase: "I have a dream".
             -"¡Di el sueño, Martin!
-¡Di el sueño!"
La cantante Mahalia Jackson gritó tras el escenario a Luther King para que lo incluyera en su "speech" ante los cientos de miles de personas que escuchaban enfervorizadas. Y él lo contó:
HE TENIDO UN SUEÑO....
"Sueño que mis cuatro pequeños hijos vivirán un día en un país en el cual no serán juzgados por el color de su piel".
He soñado que un día los hombres se levantarán y comprenderán que están hechos para vivir unos con otros como hermanos.
Ese día seremos juzgados por lo que somos y no por el color de la piel, todos los hombres respetarán la dignidad y el valor de la persona humana.
Sigo soñando que un día la guerra llegará a su fin, los hombres transformarán las espadas en arados, las lanzas en hachas y las naciones no se levantarán unas contra otras, y no se estudiará más el arte de la guerra.
 El cordero y el león comerán juntos y todos los hombres podrán sentarse sobre su viña y nadie sentirá miedo.
Aún sigo soñando que con toda esa fe  seremos capaces de derrotar el desespero y llevar una luz nueva a las cámaras oscuras del pesimismo.
Llegará del día en que las estrellas de la mañana cantarán en coro a la paz en la tierra"
                 Era el final de la famosa marcha sobre Washington por el Trabajo y la Libertad.
                En 1955 Martin Luther había animado a la población a secundar el boicot pacífico a los autobuses Montgomery por la segregación racial que practicaban, no solo en los transportes públicos sino en los restaurantes, escuelas e incluso en lugares públicos, hecho que nos recordaba a la implantación del apartheid en Sudáfrica.
                En este caso, la desencadenante de la revuelta histórica fue una mujer,  Rosa Parks porque se negó a levantarse y ceder el asiento a un pasajero blanco. Las primeras diez filas del autobús estaban reservadas exclusivamente para blancos. Parks, que entonces tenía 42 años, estaba en la undécima y cuando el autobús se llenó, declinó levantarse para que se sentaran personas blancas que iban de pie. Fue detenida pero esta actuación tuvo su recompensa: en 1964 se consiguió aprobar la Ley de Derechos Civiles y al año siguiente, la Ley del Derecho al Voto.
En la tumba de MLKing se puede leer: "Free at last" Libre al fin").
                En 2008, cuarenta años después de ese sueño, llegó a la Casablanca un presidente de color negro, Barack Obama, encarnando el legado en parte de Luther King y con la certeza de seguir la estela de su sueño: el triunfo de la aspiración afroamericana en EEUU de votar y ser votado.
Heredero de la oratoria y el ímpetu del icono de la lucha racial, reflejo tangible de la toma del poder político de los negros en EEUU, Obama también habló en la escalinata del monumento a Lincoln sobre el "sueño". Pero la situación social y política en ese momento era diferente. Si antes era la esclavitud el mayor  obstáculo para la igualdad, ahora es la marginación económica.
Además Obama era un político, mientras que King era un "profeta".
                Lo más probable es que ese sueño, como la tierra prometida, sea la reconciliación de los seres humanos, la meta inalcanzable de la perfecta armonía racial, de la absoluta igualdad... Y como tal, un  sueño todavía pendiente, siempre en el horizonte.
                Si nos atenemos a las estadísticas, un 38% de los presos de las cárceles de EEUU son negros (siendo el 12% de la población); solo el 15% han ido a la Universidad; ganan 20.000 dólares menos de media al año por el mismo trabajo y casi el 30% son pobres. Seguro que Martin  L.K. soñó algo mejor cuando removió los cimientos del racismo con su "I have a dream" en aquel verano del 63.
Como he dicho al principio, estamos cerca del 30 de enero, por lo que no podemos olvidar al padre y gestor de la "paz y la no violencia" e, al que  R.Tagore llamó Mahatma Gandhi "Alma grande", paradójicamente asesinado también por un fanático en el año 1948.
                En él se inspiraron los anteriores y muchos movimientos pacifistas que a lo largo de la historia han surgido formando una estela infinita  por la paz.
                Gandhi promovió métodos de lucha social novedosos como la práctica de la huelga de hambre, las sentadas sin responder a las agresiones, rechazando la violencia y la lucha armada, para que cada uno siguiera los planteamientos de su conciencia personal llegando incluso a la desobediencia civil si fuera necesario.
                Participó en la consecución de la independencia de la  India del Imperio Británico, intentó unificar las castas, que se respetasen las religiones y todo ello sin emplear la fuerza o la violencia. Lo único que le partió el alma fue la separación de los Pakistán por motivos religiosos.
                He citado a todos estos personajes históricos  que buscaron la justicia y la igualdad entre las personas, pero,
¿ Somos conscientes de la cantidad de personas cooperantes, voluntarios, próximas a nosotros, que están trabajando por la paz y por una mayor justicia social, por la igualdad y la solidaridad humanas?
¿Y todos los que se han desplazado a las islas griegas a ayudar a los refugiados para que en esta tremenda ola de frío que nos asola para que no mueran  a la intemperie?
Porque al fin y al cabo  ¿Qué es la paz sino un reparto de los recursos de la tierra para que lleguen a todos a través de  una equitativa distribución?
                Recursos económicos "hailos" en el mundo, lo que falla es el acopio que cada uno hace de ellos.
              Día de la Paz y la No Violencia son todos los días del calendario aunque bien pensado, sería mejor que no existiera porque eso querría decir que no hacía falta. Mientras tanto hay que difundir estas ideas entre los alumnos y  los jóvenes en general, porque ya se sabe: Abramos  los ojos, sembremos  ideas porque siempre hay otras visiones a tener en cuenta "
                Hoy enero de 2017, a 54 años después del" sueño" , todavía faltan objetivos por cumplir.
Hemos aprendido a volar
como los pájaros,
 a nadar
como los peces,
pero no
hemos aprendido el sencillo
arte de vivir como hermanos. (Martin Luther King)
   

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